La creación de Residencias Virgen de la Oliva nace como un proyecto empresarial, como residencia geriátrica y sociosanitaria, de la Familia Ortiz Bravo, siendo sus inicios en enero de 2002 y su culminación con la apertura de puertas, el 15 de marzo de 2005.
Dicho proyecto de futuro, hoy hecho realidad, se sitúa entre los proyectos más ambiciosos y competitivos.
Tenemos una capacidad de 452 plazas, con 281 habitaciones, de las cuales 169 son dobles y 114 individuales; que disponen de todos los equipamientos necesarios para su mayor comodidad.
Esta infraestructura nos permite trabajar en todos aquellos retos posibles desarrollando un centro adaptado, accesible, moderno y práctico.
Un centro con cabida para todos, tanto para las personas autónomas como para aquellas que necesitan asistencia.
“Una residencia geriátrica con cabida para todos, dependientes y no dependientes.”